viernes, 1 de marzo de 2013

COMPRESIÓN DE SONIDO

Compararemos cinco tipos de compresión de sonido:

                                                                Tamaño                Frecuencia         

1º Formato original en mp3                   3,9 MB                      44kHz.
2º Formato WAV                                 42,5 MB                      44kHz.
3º Formato MP3                                    1,9 MB                      11kHz.
4º Formato OGG                                  1,8 MB                      11kHz.
5º Formato WAV                                 10,6 MB                      11kHz.

La calidad cambia cuando cambiamos la frecuencia, siendo mejor la de 44kHz, pero dentro de la misma frecuencia, la calidad es la misma.
Conclusión: si queremos tener una canción con muy buena calidad nos conviene el formato mp3 con 44kHz, ya que nos ocupa muchísimo menos que el WAV, pero si no somos tan exigentes con la calidad (la diferencia no es muy grande) nos convendría descargar el formato OGG a 11kHz.
El peor es el formato WAV, ya que teniendo la misma calidad dentro de los dos tipos de frecuencia, nos ocupa muchísimo.

Tipo de compresión que aplica el algoritmo MP3:
El sistema de codificación que utiliza MP3 es un
algoritmo de pérdida. Es decir, el sonido original y el que obtenemos posteriormente no son idénticos.
Esto se debe a que MP3 aprovecha las deficiencias del oído humano y elimina toda aquella información que no somos capaces de percibir. Se han realizado multitud de estudios de percepción acústica descubriendo que hay una serie de
efectos que pueden ayudar a la codificación del sonido con el objetivo de reducir todo lo posible la cantidad de información inútil o redundante. Los más importantes son:
-Los límites de audición.
-Efecto de enmascaramiento. 
-Redundancia de estéreo.

Para realizar ésta acción de "pérdida de información" se utiliza un sistema
llamado Codificación de Sub Bandas, proceso por el cual la señal se descompone en sub bandas a través de un banco de filtros. Éstas sub bandas
se comparan a continuación con el original mediante un modelo psicoacústico
que es el encargado de determinar que bandas se pueden eliminar y cuales no.
Dependiendo de la calidad que deseemos obtener, se eliminarán más o menos
bandas. Para finalizar el proceso, se cuantifican y codifican las sub bandas resultantes, y el resultado final se comprime mediante un algoritmo estándar, obteniendo así el fichero MP3 resultante. El proceso de codificación es mucho más complicado que el de decodificación, por ello se tarda mucho más en codificar un archivo MP3 que en reproducirlo.